El envejecimiento conlleva múltiples cambios en el cuerpo y la mente, y uno de los retos más complejos es el deterioro cognitivo. En Serager, Residencia José Ariño, convivimos a diario con personas que padecen Alzheimer u otras formas de demencia. Para nosotros, el cuidado de estas personas va mucho más allá de la atención asistencial: es una labor de acompañamiento humano, emocional y profesional.
Este artículo tiene como objetivo explicar cómo trabajamos con residentes que presentan deterioro cognitivo, desde una mirada integradora y respetuosa con su dignidad, sus emociones y sus capacidades conservadas.
¿Qué entendemos por deterioro cognitivo?
El deterioro cognitivo hace referencia a la pérdida progresiva de funciones mentales como la memoria, la orientación, el lenguaje o la capacidad de razonamiento. Las demencias, y en particular el Alzheimer, son las causas más comunes.
Estas enfermedades no afectan únicamente a las funciones cognitivas. También alteran el estado emocional, la conducta, la percepción del entorno y la capacidad de relacionarse con los demás. Por eso, requieren una atención especializada, sensible y continua.
En Serager, tratamos a cada persona con deterioro cognitivo como un ser completo, con historia, emociones y necesidades. No centramos nuestro trabajo en la enfermedad, sino en la persona.
Evaluación inicial y plan personalizado
Desde el momento del ingreso, realizamos una valoración integral de la persona con deterioro cognitivo. Esta incluye:
- Nivel de deterioro cognitivo (leve, moderado o avanzado)
- Capacidades funcionales y grado de dependencia
- Estado emocional y conductual
- Gustos, aficiones y rutinas previas
- Relación con su entorno familiar y social
Con esta información, elaboramos un plan de atención individualizado. Este plan se revisa periódicamente y se adapta a la evolución de la enfermedad y a los cambios que vayan surgiendo.
Entorno adaptado y seguro
El entorno físico es un factor clave en el bienestar de las personas con demencia. En Serager hemos adaptado los espacios para que sean cómodos, seguros y fácilmente comprensibles. Algunas medidas que aplicamos son:
- Señalización clara y visual para facilitar la orientación
- Decoración cálida y hogareña, evitando estímulos confusos
- Iluminación natural y buena ventilación
- Espacios amplios y sin barreras arquitectónicas
- Zonas comunes que invitan a la socialización sin generar agitación
Todo está pensado para minimizar la desorientación, reducir el estrés y fomentar la autonomía dentro de las capacidades de cada residente.
Equipo especializado y cercano
Nuestro equipo está formado por profesionales con formación específica en el abordaje del Alzheimer y otras demencias. Desde auxiliares hasta personal médico, todos compartimos una mirada centrada en la persona.
Aplicamos técnicas de comunicación adaptada, validación emocional, manejo de alteraciones de conducta y abordaje no farmacológico. La paciencia, el respeto y la escucha activa son herramientas fundamentales en nuestro día a día.
Actividades de estimulación cognitiva y emocional
La estimulación cognitiva es una de las herramientas más eficaces para frenar el avance del deterioro y mantener las capacidades existentes el mayor tiempo posible. En Serager organizamos talleres y dinámicas adaptadas al nivel cognitivo de cada residente:
- Juegos de memoria, atención y lenguaje
- Estimulación sensorial (texturas, sonidos, aromas…)
- Reminiscencia: trabajar con recuerdos positivos del pasado
- Actividades artísticas y creativas
- Terapia con música y movimiento
También cuidamos mucho el plano emocional: trabajamos con la expresión de sentimientos, fomentamos la autoestima, validamos sus emociones y acompañamos en momentos de confusión o angustia.
Rutinas estructuradas y predecibles
La rutina aporta seguridad a las personas con deterioro cognitivo. Por eso, en Serager organizamos el día a día con actividades estructuradas, horarios estables y pautas que favorecen la previsibilidad. Este enfoque ayuda a reducir la ansiedad y favorece el equilibrio emocional.
Sin embargo, dentro de esa estructura, dejamos margen para la flexibilidad y la personalización: cada persona tiene sus ritmos, sus preferencias y sus necesidades únicas.
Participación familiar activa
La familia es un pilar fundamental en el proceso de acompañamiento. Mantenemos un contacto constante con los familiares de los residentes con Alzheimer o demencias, no solo para informar sobre su estado, sino para integrarles en las decisiones y en la vida del centro.
Además, ofrecemos orientación y apoyo emocional a los familiares, que muchas veces también sufren ante el avance de la enfermedad. Sabemos que el acompañamiento es más efectivo cuando se construye de forma conjunta.
Abordaje conductual no farmacológico
Muchas personas con demencia presentan episodios de agitación, desinhibición, tristeza o apatía. En Serager trabajamos estos síntomas de forma no farmacológica siempre que sea posible.